Tanto la sierra como la villa de Albarracín se destacan por su increíble belleza natural e histórica, un destino turístico que también puede visitarse durante el invierno.
Situada a menos de treinta kilómetros de Teruel toda la Sierra de Albarracín ofrece paisajes maravillosos, formados por conjuntos montañosos, valles y macizos, mientras que la ciudad de Albarracín propone un recorrido por su historia a través de sus monumentos.
Existen visitas guiadas tanto por la ciudad de Albarracín como por la Sierra que durante el invierno presenta un paisaje cubierto de nieve y especies típicas de la fauna ibérica como ciervo, el búho real y el gato montés, además de conejos, liebres y jabalíes.
Las visitas guiadas por la Sierra de Albarracín se realizan siempre para grupos, lo mismo que los tours que recorrer los sitios más emblemáticos de la villa, paseando por sus estrecha y sinuosas calles y descubriendo a cada paso un poco de su historia.
El paseo recorre toda la ciudad y llega hasta donde se encuentra el castillo que fuera en la época un sitio estratégico para la defensa de la villa lo mismo que sus murallas, existiendo también algunos edificios con características islámicas que han sido construidos totalmente en piedra
Albarracín cuenta además con una excelente oferta hotelera con hoteles, hostales y casas rurales que permiten disfrutar de estancias magníficas y descansar.
La ciudad de Albarracín ofrece también diferentes propuestas de restaurantes y bares donde pueden degustarse platos típicos de la cocina turolense en la que se destacan excelentes embutidos, como quesos y jamones, además de comidas típicas como el, estofado de ciervo, el asado de cabrito, la caldereta de cordero o las migas con uva.
Ideal para una escapada de invierno para descansar y disfrutar de la naturaleza los bonitos paisajes y la hospitalidad de su gente, Albarracín y su sierra son un destino perfecto para visitar en familia, en pareja o con amigos.
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