Los Mayos de Albarracín 2016

Este año como cada 30 de abril se ha realizado la tradicional ronda de los Mayos en la Sierra de Albarracín, una fiesta que ha incluido actuaciones de jotas y diversos conciertos. Los Mayos de Albarracín son una antigua tradición que se viene celebrando desde hace más de cuatro siglos y cuya finalidad era el emparejamiento de los mozos y mozas solteros del pueblo.

Según la tradición que marca los Mayos de Albarracín, antes de comenzar la ronda los mozos se reunían en una bodega para degustar una sabrosa y suculenta cena. 

Más tarde, se realizaba el sorteo de las Mayas y cada mozo casadero de la localidad le tocaría a una de las mozas por azar. Esta curiosa costumbre sigue hoy teniendo vigencia y se realiza en varias localidades de la comarca como Albarracín, Guadalaviar, Gea, Noguera y Jabaloyas.

La antigua tradición de “Los Mayos” en la Sierra de Albarracín, es una reminiscencia de las antiguas “fiestas de la fertilidad y la llegada de la primavera” y se la ha mantenido vigente a través del paso del tiempo tomando distintas formas en algunos de los municipios de la zona. Curiosamente,

Los Mayos es una costumbre que se va extendiendo cada vez más a los municipios de toda la provincia de Aragón y quienes proponen esta fiesta dicen que se trata de una manifestación y de un movimiento de recuperación de las más viejas tradiciones folclóricas. La música es la de siempre, aquella que ponen las típicas rondallas y completan los cantadores de jota como grandes protagonistas.


Mayos son los cantos que se dedicaban a las solteras durante la noche del 30 de abril al 1 de mayo, se trata de verdaderos “poemas de amor” que la mayoría de las veces se componían para la ocasión. A pesar del paso del tiempo en la actualidad es posible escuchar los testimonios de personas mayores que han vivido desde siempre en distintas localidades de la Sierra de Albarracín, y que apuntan siempre a ritos similares.

Estos antiguos pobladores de Albarracín dicen por ejemplo, que la noche comenzaba con un sorteo del que participaban los mozos solteros, reunidos en un local y que aprovechaban para merendar o cenar, mientras preparaban tantas papeletas como mozos y mozas había en el pueblo, con los nombres de cada uno de ellos.

Hoy, en todos los municipios donde aún subsisten Los Mayos se sigue cantando a la Virgen, pero no en todos se celebra el sorteo mientras que en otros fueron cambiando las destinatarias de los cantos. En Bronchales se canta a las Reinas de las Fiestas o las mozas que se casan, también las mismas destinatarias son el objeto de los cantos en Albarracín, mientras que solo en Noguera y Guadalaviar se mantiene el tradicional sorteo.

Aún hoy es posible encontrar en la Sierra de Albarracín parejas que iniciaron su relación en una fiesta de los Mayos y en la capital de la comarca siguen reuniéndose para esta fecha cientos de personas que acompañan a los cantadores y tañedores.

0 comentarios:

Publicar un comentario